Diseño colaborativo de servicio público: "Animación a la lectura intergeneracional".

 

Buenos días: 

El proyecto que propongo, para el Reto 4, de este curso de Fundamentos de gobierno abierto se denomina Animación a la lectura intergeneracional.

El proyecto se estructura, básicamente, en animar a la lectura en dos colectivos aparentemente muy distantes entre sí, a saber: los niños y los mayores.

Consiste en lectura de cuentos en voz alta de los niños a los mayores en residencias y centros de día y, viceversa, la lectura de cuentos de los mayores a los niños en colegios e institutos.

Los actores implicados son varios colectivos, bibliotecarios, animadores socioculturales, profesores, trabajadores sociales, etc., además de los propios niños y mayores.

El proyecto es bibliotecario por cuanto será la biblioteca pública el nodo principal que hará de enlace entre los nodos de la escuela y la residencia. Además, considero que debe ser un bibliotecario quien coordine y modere la actividad.

Para ponerlo en marcha, se requiere que la biblioteca establezca un acuerdo mínimo con el resto de partes para que los mayores, que deseen participar, lean cuentos a los niños de diferentes edades en los colegios e institutos. Igualmente, que sean los niños quienes lean cuentos a mayores en residencias y centros de día de mayores. Al término de la lectura en voz alta de establecerá un diálogo entre niños y mayores, moderado por el bibliotecario, sobre el contenido y la forma de lo leído.

Es esencial que el diseño del programa, aunque liderado por la biblioteca pública, sea colaborativo entre los diferentes actores intervinientes por el hecho de que niños y mayores son co-creadores de la actividad.

Los aportes que puede producir en los diferentes actores pueden ser significativamente beneficiosos. En los niños puede ser una magnífica lección enseñar algo a los abuelos. Entre los mayores encontrarse una mañana con niños será una fiesta. Los bibliotecarios aportarán los materiales y buscarán que la lectura perdure en colegios y residencias con nuevas medidas, como lotes colectivos, charlas de escritores, etc. Para los profesores será una experiencia de aprendizaje por proyectos en el que ellos niños aprenderán enseñando. Para trabajadores sociales o animadores socioculturales será una actividad enriquecedora para sus usuarios.

Lo positivo de la relación que procura la actividad tiene varias dimensiones, a saber: 1) la relación entre colegios y residencias que no está suficientemente trabajada, 2) la relación entre la lectura y el diálogo posterior entre personas diferentes, y 3) la relación intergeneracional entre personas de tan distintas edades y expectativas.

Proyectos de este tipo llevan dificultades reseñables aparejadas. Por ejemplo, el problema de establecer una agenda entre colegios y residencias, que podría solventarse con una planificación con suficiente antelación. También el hecho de que en las residencias hay personas con diferentes capacidades y enfermedades que, en ocasiones, pueden en un primer momento asustar a los niños. Con el trabajo de profesores y mediadores, los niños finalmente podrán reconocer básicamente lo que supone la vejez, la enfermedad, la diversidad, etc.

Un precioso proyecto, a mi juicio, de coproducción y participación que puede llevarse a cabo sin grandes recursos.

Salud a todos.